domingo, 30 de septiembre de 2012

CONTEMPLA Y CALLA




Así mi calle con la lluvia de hace tres días

Hoy me he quedado sola en casa, Julio, siempre que venimos a San Juan, aprovecha para darse una vuelta por Cartagena y su Armada del alma. 
Quiero aprovechar el día a tope, pero son tantas las cosas que deseo hacer que no hago nada, bueno sí, la lavadora ya está en marcha, pero no me refiero a esas labores domésticas que son norma y práctica diaria, lo que quiero son cosas distintas... . Salir no me atrevo ni a la playa ni a la piscina porque necesito la mano del ausente para caminar, no sea que tropiece y se ma rompa algun hueso, en casa es distinto puedo con todo y me muevo con soltura. Es curioso, siempre pensé que sería él quien necesitaría mis cuidados, no en vano a lo largo de tantos años juntos ha pasado por siete operaciones, alguna tan grave como la del corazón y yo sólo por diez embarazos, sin embargo, desde hace dos o tres años, tal vez cuatro no estoy segura, mi estructura ósea no responde a mi agilidad mental. Conste que no lo digo porque sea muy inteligente, sino porque mentalmente me apetecería hasta dar la vuelta al mundo y no puedo hacerlo.

Pero que nadie sienta pena por mí

 
 Monte de Elda (Alicante)
 Pero que nadie sienta pena por mí, hoy estoy aquí, ante el día que comienza, mis ojos aún cargados de sueño y el corazón latiendo por un ansia que nunca se calma. Vengo de la noche a la cumbre de la mañana, me despierta la aurora, toda luz, toda esperanza, el verano ardiente de aves, mariposas en busca de las flores, del aroma de las rosas, del sándalo enhiesto..., ya ha pasado. He vuelto a subir al monte, abandonando lastre, a renovar la luz con el sol de la alborada, la noche queda atras cuando el paisaje habla, todo se ilumina, todo se hace nuevo, en el aire siento renacer la voz de Dios que en el paisaje habla:
 
"Todo es tuyo, por tí lo hice, contempla y calla..."
 
 

1 comentario:

ARCENDO dijo...

DIOS siempre habla y... acompaña. Q sientas su presencia, es lo q yo le pido para tí. Las fotos, como siempre, preciosas. Gracias por compartirlas y compartir también todos tus momentos y soledades. BESIÑOS.